“El portalito”
***El Portalito***
Feliz iba el chirisito,
chupandose un cuquito,
hasta que algo, lo distrajo .
Vio aun gringo leyendo en voz
alta, Weekend en Guatemala,
de Asturias, que con su español,
recién estranado, parecía estar
haciendo gárgaras con el atol.
El patojo iba por el mandado,
pero al escuchar a los cuenteros,
se distrajo y se quedó embobado,
probando ese bocado de los historias
sin final...
Una mujer pasó y le ofreció un tamal,
y sin pensarlo dos veces se lo tramo,
el patojo del mandado se olvidó,
pues un antojo se le cruzó.
El portalito a la distancia era chiquito,
pero una vez adentro este crecía y crecia,
principalmente cuando pasaba la cofradía,
de la Santa Chavela que era como
un dolor de muela.
Pues siempre era presedída por el Cadejo,
la Ciguanaba y el Sombreron,
los cueles eran chutes por verdadera
vocación...
El patojo seguía chupando su cuquito,
cuando un gritó lo despertó,
fue entonces que reaccionó,
pues del mandado se recordó.
Pero tenia un problema
y es que el pisto voló,
se le olvidó en que se lo gasto;
entonces empezó a rezar letanías,
invoco a todos los santos, desde,
San Perolo San Pertolito,
hasta el Santo Cachon.,
pero ninguno lo escuchó.
Fue entonces que una campana
se dejó escuchar por aquel lugar,
era el Hermano Pedro y su eterno
mensaje: "Recodaos hermanos,
que un alma tenemos y si la perdemos,
no la recobramos..."
Al ver al chirisito el hermano Pedro,
se apiadó de él y le dijo:
Pan tengo pero pisto nel
y el patojo le respondió :
Si llevo el pan nadie lo notará,
hagame uste la caridad...
El patojo tomó el pan y lo
metió en la canasta y lleno
de alegría sampo la carrera,
ni media cuadra había avanzado,
cuando recordó que ni las gracias,
le había dado....
Pero al volver el hermano ya era ido,
desde aquel día, hasta el sol de hoy,
el chirisito que para hoy ya ya no es
tan chiris, vuelve todos los días al portal,
pero el hermano no aparece,
porque la mejor forma de agradecer,
es regresando el favor a quien no,
puede pagarlo.
Oxwell L'Bu copyright 2015
#AntiguaGuatemala
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